7 consejos para dormir en el avión

Ay esos viajes largos en los que no puedes dormir en el avión… Como puedes llegar a odiar a esa persona que va roncando en el asiento de al lado…

Y es que hay gente que cierra los ojos nada más despegar y despierta cuando el avión aterriza, sea la hora que sea y sea el vuelo corto o largo, y hay gente que no tiene esa suerte.

Si eres de este segundo tipo, seguramente te desquicias cada vez que haces un viaje largo en avión. Al no dormir en un vuelo nocturno llegas al destino hecho polvo, y si cruzas varias franjas horarias los efectos pueden ser devastadores.

Antes de recurrir a remedios drásticos como tomar pastillas para dormir, prueba todos estos consejos que tal vez te ayuden.

1. Si tienes opción de elegir asiento hazlo donde la tranquilidad es más óptima, que es a mitad de la cabina lo más alejado posible de la cabina de personal, baños y motor del avión. El asiento junto a la ventana también es más cómodo para dormir, salvo que tengas las piernas muy largas y las quieras sacar por el pasillo. En ese caso una buena opción son los asientos de salida de emergencia, donde hay más espacio.
2. Lleva una almohada de viaje para poder apoyar mejor la cabeza, así como ropa cómoda, ligera y chaqueta o algo para taparte, nunca sabes con qué temperatura te vas a encontrar en el avión y tanto el frío como el calor resultan muy desagradables para dormir.
3. Un antifaz y unos tapones para los oídos también te serán de gran ayuda para aislarte un poco, sobre todo si te toca un asiento cerca del motor donde el ruido es mayor.
4. Si tienes gente al lado, mira a ver si hay filas de asientos libres y te cambias de sitio, en una fila para ti solo te podrás hasta tumbar. Eso sí, tienes que estar muy alerta para cambiarte rápidamente en cuanto dejen de entrar pasajeros.
5. No comas demasiado antes de dormir, y si te tomas una copita de vino o una cerveza también puede que te ayude, aunque ya sabes que en el avión el alcohol siempre con moderación ya que produce deshidratación y la sensación de sed te hará despertar.
6. Descálzate sin miedo, así estrás más cómodo, y si no llevas calcetines asegúrate de echar unos al equipaje de mano por si hace frío en el avión.
7. Relax, no pienses demasiado en ello, si estás todo el rato pensando que no te vas a dormir, simplemente te obsesionarás y no dormirás. En su lugar ponte a hacer algo como leer, escuchar música, ver un peli… Con la mente distraída el sueño acabará viniendo sin darte cuenta.

Y con esto solo queda desearte ¡Feliz viaje!

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Beatriz Vergara

Soy la coordinadora internacional de Interlink y me encanta poder ser el “trampolín” para aquellas personas interesadas en vivir una experiencia en el extranjero para aprender un idioma.

Y es que me apasionan los idiomas, los diferentes países y sus culturas desde que me trasladé a Inglaterra para estudiar, donde comencé un periplo de 5 años durante los que también viví en Francia y en Méjico.

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