Aprender idiomas es un propósito que mucha gente compartimos hoy en día, y para ello nos lanzamos a la aventura de pasar una temporada en el extranjero, bien para estudiar, para trabajar o ambas.
Los beneficios de vivir en otro país son muchos, no solo aprender idiomas. Es una experiencia de vida que te va a aportar mucho valor tanto desde el punto de vista profesional como personal.
La cuestión es que todas las personas, sin excepción, siempre tenemos algo que mejorar. Si sigues leyendo verás cómo una estancia en el extranjero para aprender idiomas es una oportunidad para mejorar estos “puntos débiles” que mucha gente compartimos.
Para empezar, cuando decides irte al extranjero y sea cual sea el propósito de tu viaje, estás aceptando un nuevo desafío, te estás atreviendo a salir de tu zona de confort.
Y tal vez es un desafío que asusta un poco porque suele conllevar una serie de dificultades como pueden ser la barrera lingüística, el choque cultural, etc.
Aprender a superar estas dificultades es parte de la experiencia, y eso es lo que te va a ayudar a desarrollar ciertas destrezas muy valoradas a nivel profesional.
Como seres sociales que somos la comunicación es una de las habilidades fundamentales que debemos desarrollar. Y concretamente en el ámbito académico o profesional, cuanto mejor sepas comunicar mejores serán los resultados obtenidos, independientemente de tu propósito.
¿Cómo vas a mejorar tus habilidades comunicativas durante tu estancia en el extranjero?
Cuando estás en el extranjero puedes y debes comunicarte con diferentes personas y especialmente con personas de diferentes nacionalidades. Esto te ayudará a aprender idiomas y también a expresarte de una manera más asertiva.
Por lo tanto, estar en el extranjero es la oportunidad de identificar tus debilidades comunicativas e interactuar con nuevas personas para mejorarlas.
¿Te consideras una persona flexible? Una persona que tiene la capacidad de ser flexible puede lidiar mucho mejor con situaciones difíciles que una persona que no lo es.
Es decir, ser flexible te ayuda a resolver problemas y adaptarte a nuevos entornos y realidades con mayor facilidad.
Cuando te mudas a un nuevo país, empiezas en un nuevo trabajo o conoces gente nueva te estás convirtiendo en parte de nuevos cambio y, lo quieras o no, los cambios son parte de nuestra vida cotidiana. No nos queda otra que adaptarnos a ellos de la mejor forma posible.
La cantidad de cambios que vas a experimentar al irte a vivir un tiempo a otro país te van a ayudar mucho a mejorar esta habilidad.
El último consejo sobre cómo mejorar las debilidades durante su estancia en el extranjero es el más importante.
Para mejorar esas debilidades es importante que te conozcas bien a ti mismo y seas capaz de identificarlas. Para ello intenta ser siempre proactivo y de mente abierta, escucha a las personas que te rodean, acepta las críticas y sé crítico contigo mismo.
Ser crítico no significa ver solo tus debilidades. Hay críticas negativas y hay críticas constructivas, aprovecha las constructivas y busca siempre descubrir y hacer evolucionar estos puntos en ti.
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